CARLOTA DE MIGUEL MIHURA

         Estrenada en el Teatro Infanta Isabel de Madrid el 12 de abril de 1957.

De las llamadas “obras de la segunda época” de Miguel Mihura, Carlota es una comedia policíaca de humor negro en dos actos.

         Charlie Barrington se encuentra en la calle junto a su casa, hablando con el sargento Harris mientras esperan al detective Douglas Hilton. Escuchan a Carlota, la esposa de Charlie, tocar el piano dentro de la casa. Al llegar el detective, llaman a la puerta pero la tardanza de Carlota en abrir les preocupa y fuerzan la puerta. Al entrar la encuentran muerta. Pero nadie salió ni entró en la casa. ¿Quién mató a Carlota? ¿cómo lo hizo? ¿fue un suicidio organizado? ¿Por qué ocurren estas cosas absurdas cuando podía haber amor y comunicación?

         Ambientada en Londres en 1906 donde imperaba la moral victoriana, Carlota es más bien todo lo contrario. Podemos asistir a la evolución de unos personajes que sufren, se ríen y divierten, sienten celos y conspiran, son infieles, se enamoran y asesinan. Teatro policiaco muy cómico interpretado por seres vanidosos, histéricos, brillantes y tiernos, con crisis de ausencia, ¿hay alguno normal? Una muestra más de la facilidad de Miguel Mihura con los juegos semánticos, psicológicos y con el enredo cargado de absurdo.

         Con fuertes dosis de ironía, humor y toques absurdos, nos encontramos ante un espectáculo de entretenimiento que hará que los espectadores casi ni respiren. Porque como dice Carlota “¿Qué hay más apasionante para un inglés que un crimen, que un enigma, que una sospecha, que algo turbio y extraño que haga trabajar lentamente su imaginación?”